martes, 21 de julio de 2009

Surrealistic pillow

Un universo multicolor se despliega ante mi como un inmenso abanico de posibilidades extrañas y mágicas. La fusión con el medio a través de todos los sentidos no tarda en aparecer y puedo sentir los sonidos y todas las cosas que me rodean porque ahora forman parte de mi cuerpo, la habitación con todo lo que hay en ella son prolongaciones de mí.
Una peculiar mezcolanza de sustancias químicas que escapan a mi conocimiento recorren ahora mis venas, todo yo soy erógeno ahora. Puedo retorcer mi espalda y mis extremidades que al rozarse producen ingentes cantidades de placer a borbotones.
Algo ocurre en la mente, nuevos canales que desconocía que poseía se abren mostrándome el mundo desde otra perspectiva mucho más atractiva. Puede parecer una experiencia casi religiosa, muy cercana a lo trascendental.
Las conversaciones con el váter pueden ser divertidas siempre que el cambiante suelo o los traviesos cromatóforos de los azulejos no llamen mi atención.
Una pantalla con letras que no paran de bailar no es lo más adecuado para dejarse llevar, en cambio la música o una pelicula sí son buenos conductores, aunque es preferible la música para navegar por los más profundos y ocultos pensamientos y recuerdos ya olvidados que regresan a nosotros como de visita. En cambio con una pelicula, cuando nos demos cuenta, seremos un personaje más.
Los misterios se desvelan, todo se ve distinto en todos los sentidos, tanto en el material como en el literario. Analizamos las cosas de una manera que sin estas increíbles partículas nos sería imposible de ver.

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